- Un informe de la cámara que nuclea a las pymes industriales sostiene que se recortaron 16.870 puestos entre noviembre y febrero.
- Los más afectados son las firmas electromecánicas, automotrices, textiles, alimenticias y de comercio.
La pérdida de puestos de trabajo no solo preocupa a quienes dependen del Estado. El sector de las pequeñas y medianas empresas (PyMES) ya está experimentando la caída de la actividad y advierte que la situación empeorará en el corto plazo.
La previsión parte de un dato: entre noviembre del 2023 y febrero de este año, en el sector de las pymes se perdieron 16.870 puestos de trabajo. Y en marzo y abril cada vez más empresas están empezando a despedir personal, ante la perspectiva de que la crisis económica se extienda en el tiempo.
Asi lo explicaron los economistas Pablo Bercovich, de la consultora Marca PyME, y Martín Kalos, de EPyCA Consultores, en la presentación del 5° Informe del Observatorio IPA, la entidad que agrupa a los pequeños industriales locales.
“El nivel de actividad tiene correlación directa con la demanda de empleo”, indicaron los analistas al exponer el informe. E hicieron hincapié en que “la política del Gobierno de apertura comercial indiscriminada va a profundizar la crisis productiva y laboral”.
“Al igual que ya pasó en la Convertibilidad, este tipo de políticas generan transformaciones estructurales regresivas en el mercado de trabajo y difíciles de revertir. Los empleos de calidad que se generan en la eventual recuperación tras la recesión no alcanzan a compensar la pérdida de empleos en toda la sociedad”, señalaron.
Según Bercovich, el ajuste que está haciendo Milei en tres meses ya es similar al que hizo Mauricio Macri en tres años. Y destacó que mientras el empleo registrado formal cayó 0,9% en el segundo semestre del 2023, en las pymes el impacto llegó al 1,4%. Esta situación, según el analista, lleva a un aumento del empleo informal y del cuentapropismo, que a su vez, deprime aún más los ingresos.
Kalos, por su parte, se refirió al impacto fiscal que se sentirá como producto de las políticas contractivas del Gobierno, básicamente a través de una caída en la recaudación, en especial por los menores ingresos en Seguridad Social e IVA que concentran más del 50% de la recaudación. “De esta manera, el ajuste fiscal al que apunta el Gobierno tiene un impacto muy negativo sobre sus propios ingresos, dificultando así que pueda llegar a su meta de déficit cero”, alertó.
Precisamente, al finalizar la presentación, el presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), Daniel Rosato, advirtió que la crisis del consumo ya golpeó con fuerza al empleo y comenzó a poner en riesgo de continuidad de miles de Pymes manufactureras.
“Vemos con preocupación la situación de las Pymes argentinas, porque habíamos advertido que la crisis de la recesión lo primero que iba a provocar era adelantamiento de vacaciones, luego suspensiones, más tarde despidos, aumento de la informalidad y cierre de fábricas. Ya estamos por la tercera etapa y pisando la cuarta. Pero el riesgo de pérdida de empresas está muy latente”, sostuvo Rosato.
El presidente de IPA señaló que en el país, hay más de medio millón de Pymes que emplean 2,3 millones de trabajadores. “De ese universo, casi la mitad depende del mercado interno, y se encuentra en riesgo ante las medidas de ajuste y de liberación de importaciones. Hoy estamos viendo que no solo hay achicamiento de planteles, sino que varias fábricas están haciendo números y proyectando como una alternativa el cierre definitivo”, alertó Rosato.
De acuerdo al relevamiento Pyme, “las primeras medidas de las empresas fueron suspensiones, eliminación de horas extra, disminución de la jornada laboral, entre otras estrategias, pero esta semana se anunciaron despidos en empresas electromecánicas, automotrices, textiles, alimenticias, de comercio, y también en el sector público”, advirtió.
El informe centró la atención en la tasa de desocupación, y recordó que alcanzó “los dos dígitos en los primeros dos cuatrimestres de 2019 (10,1% y 10,6%, respectivamente), y durante todos los cuatrimestres del 2020 y el primero de 2021 (el máximo fue de 13,1% en el segundo cuatrimestre de 2020)”.
“Desde entonces, ha seguido una evolución en caída, prácticamente sin pausas. La tasa de desocupación (de 5,7%) se encuentra hoy en niveles mínimos para los últimos 36 años, seguida por el 5,9% de 2015 en segundo lugar”, reseñó.